Varados en el aeropuerto de Acapulco se encuentran decenas de turistas

Entre calles inundadas y cuerpos sin vida, caminan turistas en Acapulco que se enfrentan a escenas devastadoras para poder llegar al aeropuerto y esperar un vuelo que los pueda regresar a sus lugares de origen, pues no hay comida, agua, energía eléctrica y los actos de rapiña son una constante en los diferentes comercios que hay en el puerto.

Vivian Chávez, originaria de Tecate, Baja California (BC), está en espera de un vuelo a Tijuana, Baja California, llegó al aeropuerto desde el miércoles a las cinco de la tarde, salió de donde se hospedaba a las nueve de la mañana junto con su esposo, cargando maletas, hacia el aeropuerto caminando y pidiendo aventón, por calles inundadas y para su sorpresa se encontró con cuerpos sin vida flotando en el agua y sobre la calle, “me impresioné mucho, fue muy desastroso y no había visto una situación similar”.

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Aseguró que vio unidades de emergencia como la Cruz Roja, pero que no levantaron los cuerpos y ahí los dejaban, por lo que siguió caminado hacia el aeropuerto.

Narró que llegó con su esposo el lunes pasado para pasar unas vacaciones, por lo que se quedaron en un hotel en la Zona Tradicional de Acapulco, sin embargo, el huracán Otis les cambió la vida. La madrugada del miércoles, el huracán tocó tierra en el puerto de Acapulco, dejando daños que hasta el momento son incuantificables y, de acuerdo con el gobierno federal, suman de manera preliminar 29 personas fallecidas.

Vivian junto a su esposo, contó que nunca habían vivido una situación así, tuvieron que refugiarse en su habitación del hotel, pero que la fuerza del viento rompió los vidrios y las láminas volaban, “Pensé que ahí me quedaba, que era la última vez, porque estuvo bien feo, pero que gracias a Dios estamos bien”.

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Dijo que después del huracán, ella y su esposo, tomaron la decisión de irse al aeropuerto en espera de un vuelo para Tijuana o que el gobierno les apoyara con algún transporte para poder salir de Acapulco, por lo que iniciaron su camino al aeropuerto. “Ante la falta de comida, luz, agua y la rapiña, nos tuvimos que salir del hotel”, precisó.

Agregó que la encargada del hotel les dijo que ahí se podían quedar, pero que ellos decidieron irse, pues también el hotel quedo destrozado y pensó que el aeropuerto sería más seguro y ahí podrían esperar un vuelo, pero la situación es la misma, no hay energía eléctrica y de lo que se enteró ahí, es que la torre de control tiene severos daños, pero que se espera que para el viernes o el sábado ya se puedan restaurar los vuelos.

Mientras tanto, comparten comida con otros turistas que están en la misma situación, porque ahí en el aeropuerto no hay comida y los puntos de venta de las aerolíneas no están funcionando, por lo que tienen que esperar. Nos contó que también pensaron en irse antes de que tocará tierra Otis, pero que ya no les dio tiempo.

Casos como el Vivian hay muchos en el Aeropuerto Internacional de Acapulco, pues decenas de turistas se quedaron varados, sus vuelos estaban programados para estos días, sin embargo, no hay nadie que les dé razón de cuando se podrán restaurar la conexión aérea, pues el aeropuerto sufrió severos daños en sus instalaciones, por lo que trabajadores sacan pedazos de techos que colapsaron, mientras que el estacionamiento sigue inundado. A pesar de esto, se espera que el viernes o el sábado se puedan reanudar las operaciones.