Tumbando Caña

Juan Antelmo García Castro

A ALEJANDRO ARCOS CATALÁN “YA LO BESÓ EL DIABLO”

Durante mi niñez, algunas veces un amigo o familiar cuando se me caía al suelo cualquier dulce o alimento me advertían: “no lo levantes, porque ya lo besó el diablo”, sin embargo, debo confesarlo, siempre hice caso omiso a la incómoda recomendación procediendo a limpiar con mi camisa reluciente de sucia el chuchuluco que había “chupado el diablo”, cuando realmente estaba contaminado por alguna bacteria callejera…En esta ocasión me permito utilizar el mítico cuento de referencia para trasladarlo a la vida cotidiana de políticos y servidores públicos, específicamente del candidato a presidente municipal de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, quien, al igual que el pasaje jocoso de las golosinas caídas al suelo, debió escuchar sensatas recomendaciones que seguramente le hicieron en su equipo de campaña, aunque el muy necio y ambicioso por el poder municipal, simple y llanamente las ignoró, levantando del piso y aliándose con siniestros personajes en quienes el pueblo ya no confía, debido a que como servidores públicos o representantes populares “se sirvieron con el cucharón”, beneficiándose personal y familiarmente como el caso de su ídolo Manuel Añorve Baños, que después de ganar las elecciones se olvidan o incumplen compromisos establecidos ante la sociedad, misma que no olvida y en su momento cobra con altos intereses facturas electorales; por tanto, a Don Alejandro Arcos Catalán a partir de ese hecho “ya lo besó el diablo”…También hizo alianza con otras personas igualmente de negro pasado, que sólo buscan seguir gozando de privilegios políticos y económicos, a esos que el pueblo más temprano que tarde les gritará con voz fuerte y clara: “sinvergüenzas, ya no los queremos otra vez como nuestros gobernantes”, negándole por ello, un sector significativo del electorado chilpancingueño, el voto a Alejandro Arcos y sino al tiempo, aunque jure y perjure que no tiene ningún acuerdo con la malquerida alcaldesa morenista próxima a salir, Otilia Hernández Martínez, con quien Arcos Catalán dice tener “una buena relación”, pero no una alianza electorera, curándose en salud pidiendo “no satanizar ningún tipo de acercamiento” con la alcaldesa que ya se va “chupada por el diablo”, dicen los que no la quieren, pero yo digo lo contrario, soy de los que la queremos y gritamos a los cuatro vientos: ¡que regrese, que regrese!…En ese contexto, Alejandro Arcos Catalán convocó a la “unidad social a todos los sectores, para salvar al municipio”, manifestando que todos los que quieran erigirse en libertadores “serán bien recibidos”, no importa su indeseable pasado, militancia partidista, religión o ideología, por ello en el inicio de su campaña, el sábado 20 de abril para ser más preciso, Arcos Catalán fue arropado por un buen número de trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo, fieles seguidores de la alcaldesa saliente, destacándose en el evento, levantando la mano al candidato del PRIANPRD, la hermana de Otilia y ex presidenta del DIF Municipal, Magdalena Hernández Martínez, por lo que muchos chilpancingueños se hacen la pregunta del millón: ¿Entonces, Alejandro Arcos, de quién o de quiénes vamos a salvar a Chilpancingo?, porque es público, notorio e inocultable que hoy en día nuestra querida capital sufre tremenda anemia en lo que se refiere a obras y servicios para beneficio colectivo, además de la grave inseguridad pública…Para variar, es un secreto a voces que Otilia Hernández ya “amarró” -bajo sus condiciones- el apoyo a Alejandro Arcos, convenciéndolo de quitar a Fernando Calixto Cuevas como candidato a Sindico y poner a uno de sus incondicionales (de Otilia, obviamente), de nombre Jonathan Ibáñez Rivera, lo mismo que a su hermana Magdalena Hernández Martínez, a la que según ubicaron como suspirante a la tercera Regiduría, despojando arbitrariamente de ese sitio al anterior candidato, así que nadie se llame a engaño, primordialmente Alejandro Arcos que “en el pecado llevará la penitencia”.